El TDAH (Trastorno de Deficit de Atención e Hiperactividad) es un trastorno del desarrollo que en la mayoría de los casos se pone de manifiesto en la niñez o en la adolescencia. Durante el transcurso de su desarrollo, el TDAH puede tomar diferentes formas. Si, como adulto, sufres de TDAH, entre otras cosas te va a resultar difícil poder quedarte tranquilo o concentrarte en tu vida familiar. Se tiene mucha información acerca del TDAH en la infancia o en el transcurso de la escolaridad, pero ¿qué sucede con el TDAH en la edad adulta? ¿Cómo se manifiesta el trastorno? En este articulo, te presentamos los síntomas del TDAH y los situamos en el contexto de los adultos. También te presentamos los posibles tratamientos para el TDAH en el adulto.
TDAH en el adulto: Los síntomas
El TDAH tiene tres características principales: la hiperactividad, los problemas de atención y el comportamiento impulsivo. Empecemos por la hiperactividad. El TDAH se caracteriza por la hiperactividad, lo que viene a decir que a las personas que padecen TDAH les resulta difícil quedarse tranquilos. Les gusta llevar a cabo actividades físicas con el objetivo de poder gastar su energía. Por lo tanto podremos observar que estas personas desde niños y a medida que van creciendo van a elegir una orientación en la que puedan mantenerse físicamente activos. Por lo que las personas que padecen TDAH con frecuencia tienden a tener profesiones en las que pueden estar físicamente activos. Esto puede ser entre otras cosas electricista o fontanero. Para una gran parte de las personas que padecen TDAH, no es cómodo pasarse todo el día en una oficina y no poder moverse lo suficiente. Por esta misma razón suelen elegir una profesión en la que pueden estar ocupadas manualmente o en las que pueden estar activas. La siguiente característica del TDAH es un problema de atención. El problema es básicamente el mismo en el caso de TDAH en el adulto que en el de la infancia. A las personas que padecen TDAH les resulta difícil permanecer concentradas en lo mismo durante un largo período de tiempo. Por lo que a menudo eligen una profesión con actividades variadas con el objetivo de no tener que pasarse todos los días haciendo lo mismo. Con frecuencia, los adultos que padecen TDAH tampoco pasan horas haciendo lo mismo cuando disfrutan de su tiempo libre. Son muy activos y van de un sitio a otro. La tercera característica del TDAH es un comportamiento impulsivo. En la infancia, esto se manifiesta con frecuencia por el hecho de que alborotan la clase o que esperan impacientemente una recompensa o reconocimiento. Esto es diferente cuando se trata de TDAH en el adulto. El comportamiento impulsivo en el adulto disminuye a medida que nos vamos haciendo mayores, pero podemos encontrar algunos ejemplos de lo contrario. El comportamiento impulsivo puede por ejemplo manifestarse por un comportamiento imprudente al volante, ataques de ira o relaciones que cambian rápidamente.
TDAH en el adulto: El tratamiento
El estrés puede agravar los síntomas cuando se trata del TDAH en el adulto. Para la persona que lo padece es importante sufrir el menor estrés posible con el fin de poder hacer frente a sus síntomas con calma. El estrés tiene dar lugar a un aumento aún mayor de la hiperactividad, de los problemas de atención y a menudo un comportamiento más impulsivo. 'Mis15Minutos.com' ha desarrollado un programa de autoayuda en línea que puede ayudar a luchar contra el estrés con el objetivo de poder disminuir sus síntomas.
TDAH en el adulto: ¡Pasa el test de estrés!
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