El burnout es un trastorno mental en el que experimentamos una sensación de agotamiento absoluto. ¿Dónde podemos fijar el límite entre el estrés normal y un agotamiento absoluto? ¿Cuándo podemos decir que estamos temporalmente cansados y cuándo debemos empezar a estar realmente preocupados?

¿Qué es el burnout?

El burnout suele ser la última fase de un agotamiento que lleva ocurriendo desde hace años. Cada vez viene más trabajo que hacer y no sabemos muy bien cómo hacer frente a toda esta presión profesional. Con frecuencia, las personas que sufren burnout suelen ser personas que se dedican en cuerpo y alma a su trabajo. Por lo tanto les gusta que todo esté terminado y que todo esté en orden. Sin embargo, debido a que el volumen de trabajo se hace demasiado grande o porque ya no consiguen los resultados que esperaban, en muchos de los casos llegan a la conclusión de que lograr esto ya no es posible. Este tipo de personas suelen tener la impresión de que todos los esfuerzos no han servido para nada. Al cabo de cierto tiempo, también se suelen preguntar por qué son ellos los que lo hacen todo. A pesar de todos sus esfuerzos, su nivel de estrés sigue siendo demasiado elevado e intentan presionarse aún más con la esperanza de ver los resultados de todo el trabajo que han hecho o de sacar los beneficios que esperaban. Si con el paso del tiempo esto va demasiado lejos, entonces podemos decir que se trata de burnout.

Llegados a este punto, tanto el cuerpo como la mente han sido sometidos a demasiada presión y ambos mandan la señal de que ya no pueden más. Incluso la cosa más insignificante ya es pedir demasiado. En esta fase, debido a que se está agotado, nos volvemos más sensibles hasta cuando nos enfrentarnos a las cosas más insignificantes. Tanto el cuerpo como la mente necesitan urgentemente un tiempo de descanso.

¿Acaso el burnout sólo puede producirse en un contexto profesional?

Un burnout se puede producir por distintas causas. El desencadenante que provoca el burnout no siempre tiene por qué ser necesariamente una carga excesiva de trabajo o la presión laboral. También puede ser debido entre otras cosas a la presión en casa. Puede llegar a ocurrir, por ejemplo, que una madre que se dedica a tiempo completo a las tareas del hogar y a los niños termine al cabo de cierto tiempo por ser víctima de la fatigada o del agotamiento. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el burnout está vinculado a la carga de trabajo y/o a la presión laboral.

¿Sólo las personas 'débiles' pueden sufrir un burnout?

A menudo se suele asociar el burnout con la debilidad. Por lo que a menudo las personas que padecen un burnout tienen que hacer frente a ciertos prejuicios los cuales, en determinados casos, pueden incluso dar lugar a la discriminación. Debido a que se considera como una especie de punto débil, en la mayoría de los casos las personas no hablan de buen grado de su burnout. A menudo tienen la impresión de que 'hay algo en ellos que no va bien'.

Lo contrario no es menos cierto. Las personas que sufren un burnout suelen ser muy concienzudas y perfeccionistas. Se esfuerzan mucho y son capaces de terminar una gran carga de trabajo. Estas personas hacen lo mismo cuando el listón está demasiado alto para ellos, con el fin de poder esforzarse aún más y de ir a por un nuevo objetivo. Sin embargo, puede llegar a ocurrir que se haya puesto el listón demasiado alto para sus capacidades o que se quiera llevar a cabo el trabajo con demasiada perfección. A medida que pasa el tiempo esto se puede ir acumulando y a su vez probablemente provocar un burnout.

¡Evalúa tu burnout!

Si te gustaría saber si existe algún riesgo de que puedas sufrir los síntomas del burnout, pasa nuestro test de burnout gratuito. Este test puede mostrarte en qué medida estás agotado y/o si sufres los síntomas del burnout.