Tal y como ya lo hemos mencionado anteriormente, el cuerpo y la mente trabajan juntos y las hormonas puede contribuir a la aparición y a la persistencia de una depresión. Las hormonas no son la única causa que puede contribuir a que la depresión aparezca. Existen numerosas de categorías de causas de la depresión. Proporcionamos a continuación un resumen de estas categorías. Mientras vas leyendo sobre cada categoría, no dejes de tener en cuenta que cada depresión es distinta a otra, por lo que puede también ser debida a otras causas. Una depresión puede surgir a consecuencia de la combinación de varias causas, pero también por haber vivido intensamente una sola causa. Por lo que te aconsejo leer las siguientes descripciones de estas categorías con la mente abierta.
Causas genéticas                                 <=>                             Causas del entorno
Dos categorías principales de causas de la depresión son las causas genéticas y las causas del entorno, Por causas genéticas entendemos las causas de la depresión que están ya presentes desde el momento en el que nacemos. Algunos genes o factores físicos pueden en efecto aumentar el riesgo de depresión. Teniendo en cuenta que las causas genéticas de la depresión pueden hacernos más vulnerables a la aparición de una depresión, las causas genéticas de la depresión se pueden convertir también en causas de vulnerabilidad a la depresión, aunque no por ello lleguen a provocar siempre la aparición de una depresión. Por causas de entorno de la depresión, entendemos las causas de la depresión que actúan en nuestra mente, nuestro cuerpo y lo que nos rodea. Teniendo en cuenta que cada persona reacciona de manera distinta tanto a nivel de su mente como de su cuerpo a los sucesos dolorosos y devastadores, no todo el mundo va a acabar desarrollando una depresión.

¿Causas psíquicas de la depresión?

Dentro de las causas psíquicas de la depresión se incluyen los sucesos o situaciones que provocan una fuerte emoción negativa. La depresión aparece a menudo como consecuencia de un acontecimiento perturbador que a duras penas podemos aceptar. Puede ocurrir que otra persona que haya vivido esa misma situación que tú no acabe desarrollando una depresión. Por lo que se trata en gran parte de la importancia y de la emotividad que tú le concedas a esta situación determinada. Queremos coger esta oportunidad para hacerle inmediatamente frente a la siguiente creencia generalizada: 'Sólo las personas más débiles sufren depresión o pueden desarrollar una depresión'. Esto es falso. Una depresión surge a consecuencia de la importancia así como de la emotividad que le podamos otorgar a una situación concreta. Cada persona es diferente, por lo que cada una va a dar una relevancia diferente a una misma situación, independientemente de como haya elegido hacer frente a otras experiencias vividas en el pasado. Por lo tanto, incluso las personas que parecen tener una personalidad de hierro, un carácter fuerte, pueden desarrollar una depresión en el caso de que una situación concreta a la que le otorguen mucha importancia se transforme en algo radicalmente negativo. Aún una vez transcurrido este suceso, no siempre se acaba manifestando una depresión. Entre ambos casos, está la manera en la que se elige hacer frente a la situación. La manera de hacerle frente determina el modo en el que abordas ciertas cosas para poder superarlas. Este modo de hacerle frente tiene por objetivo el integrar las situaciones difíciles de tal forma que te permita superarla de la mejor manera posible. A veces, una situación puede ser tan arrolladora o representar un enfrentamiento tan fuerte que ya no eres capaz de elegir cuál de los métodos para hacerle frente es el método correcto. En consecuencia, vas a desarrollar malos hábitos que van a agotar y debilitar tanto tu mente como tu cuerpo. Si ésto persiste durante un período más prolongado de tiempo o con mayor intensidad, puede surgir una depresión. Tu mente y tu cuerpo pasan por un exceso de actividad y tu resistencia mental y física disminuyen. Algunos ejemplos de sucesos perturbadores son los siguientes:
  • Un divorcio
  • Perder el trabajo
  • Detectar una enfermedad
  • Una mudanza
  • Pasar por un período de transición
¿Causas físicas de la depresión? Además de las causas psíquicas de la depresión, una depresión también puede tener causas físicas. Piensa por ejemplo en la aparición de una depresión en invierno. ¿Por qué básicamente suelen surgir más depresiones en el invierno? Porque el cuerpo sufre una carencia de vitamina D. Esta vitamina D asegura la alimentación de nuestro mecanismo. Además, somos felices cuando nuestro cuerpo recibe la cantidad suficiente de luz solar. En invierno, sin embargo, esto puede llegar a ser un problema, sobre todo si vives en un país en el que los inviernos pueden llegar a ser muy duros y sombríos. Además de la vitamina D, una carencia de ácidos grasos ricos en omega 3 (EPA & DHA), por ejemplo, puede llegar a ser también el desencadenante de una depresión. Por lo que ya no podemos considerar el cuerpo y la mente como dos cosas separadas. A menudo, las personas que sufren depresión también suelen ser más vulnerables a ciertas enfermedades debido a que su sistema inmune se debilita. No obstante, en la mayoría de los casos, los factores biológicos no suelen ser la causa directa de la depresión. De hecho, para que realmente se llegue a desarrollar una depresión, a menudo será necesario que haya una combinación entre los factores biológicos y cierta presión mental. ¿Qué es lo primero que suele hacer su aparición? ¿Las consecuencias mentales de la depresión o las consecuencias físicas de la depresión? Esto va a depender de cada caso. Sin embargo, suele ocurrir que nuestra mente sea la que conduzca al cuerpo hacia una depresión. Con esto queremos decir que, debido a que estás sufriendo una depresión, poco a poco vas a observar también cómo aparecen síntomas físicos. Por ejemplo, al cabo de poco tiempo puedas sufrir dolores de estómago, porque estés preocupado respecto a cierta pelea que hayas tenido. También puede suceder lo contrario. Puedes, por ejemplo, padecer una enfermedad crónica y, por este motivo, llegar a sentirte depresivo al cabo de cierto tiempo. Pongamos un ejemplo: a consecuencia de tu enfermedad crónica, no puedes salir con los amigos y a menudo tienes que cancelar esta u otra actividad. Esto puede llevarte a tener un sentimiento de aislamiento, de soledad, y así quitarte las ganas de encontrarte con los amigos. Por lo que estás constantemente cancelando tus planes y compromisos.

¿Causas genéticas de la depresión?

Ciertos tipos de depresión pueden también ser debidas a la genética. Esto viene a significar que cierto gen de nuestros padres o abuelos nos ha sido transmitido, aumentando así nuestras probabilidades de padecer depresión. Cuando se trata de este tipo de depresión, como parte del tratamiento es de suma importancia tomar determinado tipo de medicamentos. Unos estudios recientes indican que aproximadamente el 50 % de la población podrían ser portadores de un gen de la depresión. Por lo que es evidente que la depresión no está 'determinada' por nuestros genes, sino que tienen una influencia sobre la depresión. En consecuencia, una depresión no siempre va a hacer su aparición a pesar de que seamos genéticamente vulnerables a la depresión. Para que podamos considerar que estamos ante una depresión, a menudo será necesaria la combinación de varios factores

¿Estoy condenado a la depresión debido a las causas genéticas?

Leyendo el párrafo anterior, las personas que creen que este es su caso suelen pensar que están condenadas a desarrollar una depresión. Las causas genéticas de la depresión pueden contribuir a la aparición de una depresión, pero son más un tipo de vulnerabilidad que una especie de 'condena'. Si ya sabes que eres genéticamente sensible a la depresión, es necesario llevar a su debido tiempo una labor de prevención, pero esto no quiere decir que vayas a desarrollar inevitablemente una depresión.
“Genes are rarely about inevitability, especially when it comes to humans, the brain, or behavior. They’re about vulnerability, propensities, tendencies.” – Robert Sapolsky, Why zebra’s don’t get ulcers.

(traducción) “Los genes son raramente una cuestión irremediable, en particular cuando se trata de humanos, de cerebro o de comportamiento. Es una cuestión de vulnerabilidad, de propensión, de tendencias.”

– Robert Sapolsky, Por qué las cebras no tienen úlcera.

Esta citación nos permite precisar lo que significa precisamente la vulnerabilidad. Así como también es útil saber que tenemos algún tipo de alergia leve con el objetivo de evitar situaciones futuras que podrían activar esta alergia. Si, por ejemplo, has dejado de comer nueces porque eres alérgico a ellas, se reduce el riesgo de que puedas manifestar una reacción alérgica a las nueces. Para la depresión el funcionamiento es el mismo. Si realizas a tiempo una labor de prevención, y tienes en cuenta que eres vulnerable a ello, se reduce el riesgo de que llegues a desarrollar una depresión. Si a pesar de todo te apetece una nuez, o si por un momento 'no me importa mi alergia' y te comes algo que contiene nueces, entonces las probabilidades de que manifiestes una reacción alérgica son mucho más elevadas.

¿Por qué la aparición de una depresión requiere mucho esfuerzo?

Las causas de la depresión pueden ser diferentes de una persona a otra. También se pueden presentar diferentes combinaciones de causas de la depresión. Sin embargo hay un aspecto en relación con las causas de la depresión que sigue siendo el mismo sea cual sea el tipo de depresión: Mucho trabajo y esfuerzo. Puedes pensar: ¿Pero qué están diciendo? ¿La depresión, mucho esfuerzo? Piensa un poco en todo por lo que te tienes que preocupar cuando estás depresivo. Con frecuencia, las siguientes actividades te tienen ocupado día tras día:
  • Estar preocupado
  • Reflexionar en cómo se pueden hacer mejor las cosas
  • Reflexionar en la manera en la que podemos responder a las expectativas de los demás
  • Repetirse a uno mismo las tareas que tenemos pendientes porque a menudo las olvidamos
  • Determinar quien es realmente el responsable de la discusión
  • Pensar que no podemos cambiar nada a una situación
Estos pensamientos exigen mucho tanto por parte de nuestro cuerpo como de nuestra mente. Haces que estén constantemente en funcionamiento. No les permites que descansen lo suficiente y estás todo el tiempo reflexionando. A pesar de que quieras tener más cuidado llevando a cabo menos actividades, estás constantemente ocupado. Como resultado de ello, vas a olvidarte de muchas cosas y entonces se pone en marcha el círculo vicioso. Por lo tanto, ocuparse de una depresión y dejar que se combinen las causas de la depresión exige mucho esfuerzo. Debes:
  • Disponer primero de una combinación de causas de la depresión
  • Elegir la manera incorrecta de afrontar la situación
  • Fomentar los malos hábitos
  • Seguir regodeándose en estos malos hábitos
  • Pasar de una experiencia negativa a otra
  • Mantenerse en pie a pesar de todo
  • Ver como vamos hacia atrás y sin embargo nos seguimos intentando aferrar
A pesar de que a menudo no hayas elegido la situación en la cual te encuentras, sí que puedes elegir qué tipo de reacción vas utilizar ante ella, una reacción que te aporte tranquilidad y motivación. Los terapeutas pueden ayudarte a elegir, de la misma manera que el programa de autoayuda en línea puede motivarte a poner en marcha un nuevo plan de lucha que te aportará tranquilidad y felicidad.

¿Causas de la depresión: un test de depresión gratuito?

Para tener más información en relación a tu situación personal y a los síntomas de depresión que te afectan, siempre puedes pasar aquí mismo el test de depresión gratuito. Este test te puede decir más acerca de tus síntomas de depresión y cómo hacerles frente.